En el mundo globalizado en el que vivimos, la comunicación efectiva entre diferentes idiomas se ha vuelto esencial. Las empresas que operan a nivel global o tienen presencia en diferentes países y culturas suelen gestionar información en distintos idiomas para adaptarse a las necesidades y preferencias de sus clientes y empleados en cada región. Esta información puede variar en función de la empresa y su industria, pero algunos ejemplos comunes incluyen:
La traducción manual, aunque efectiva, suele ser un proceso lento y costoso que demanda recursos humanos altamente especializados y un considerable tiempo de entrega. Por ese motivo, se ha establecido como una solución indispensable y duradera la traducción automática, un proceso mediante el cual los sistemas de inteligencia artificial traducen automáticamente textos o palabras de un idioma a otro, utilizando algoritmos y modelos de aprendizaje automático.
Si bien la traducción automática no reemplaza completamente la experiencia y habilidades de un traductor humano, su aplicación inteligente y el posterior fine-tuning pueden producir resultados cada vez más precisos y adaptados a las necesidades específicas de cada empresa.
En este blog, exploraremos qué implica la traducción automática de IA, por qué el fine-tuning es fundamental para obtener resultados más precisos y adaptados a las necesidades individuales y las soluciones que Google Cloud Platform (GCP) ofrece.
La traducción automática de IA es un campo de estudio que utiliza modelos de aprendizaje automático y redes neuronales para traducir texto o hablar de un idioma a otro. Los modelos de traducción automática de IA, como el popular modelo de transformer, se entrenan con grandes conjuntos de datos multilingües para capturar patrones y estructuras lingüísticas. Estos modelos aprenden a mapear secuencias de palabras en un idioma fuente a secuencias de palabras en un idioma objetivo, y así generan traducciones.
Sin embargo, los modelos de traducción automática de IA entrenados de manera genérica pueden no capturar de manera adecuada las sutilezas y particularidades de diversos dominios técnicos o estilos de escritura.
Los ejemplos abarcan distintos ámbitos, como medicina, derecho, finanzas e ingeniería, donde una traducción automática genérica puede perder matices y precisión en términos técnicos, legales y de adaptación cultural.
El fine-tuning es un proceso que implica ajustar y adaptar un modelo de IA preentrenado para que se ajuste mejor a tareas o dominios específicos. En el contexto de la traducción automática, el fine-tuning permite personalizar los modelos genéricos para obtener traducciones más precisas y adaptadas a necesidades individuales o empresariales.
Dicho proceso se lleva a cabo entrenando el modelo con datos adicionales específicos del dominio o utilizando técnicas de transferencia de conocimiento. Esto ayuda al modelo a aprender las características particulares del lenguaje y las convenciones utilizadas en un dominio específico. A medida que el modelo se expone a más ejemplos y se ajusta a los datos específicos, mejora su capacidad para producir traducciones más coherentes y precisas dentro del dominio deseado.
GCP ofrece a las empresas la capacidad de traducir contenido de manera eficiente y precisa en una amplia variedad de idiomas y alto grado de personalización. Los distintos servicios destinados a la traducción los encontramos agrupados en Translation AI.
Es el servicio principal en el que se generan los modelos de traducción personalizados a partir de reentrenar un modelo de base con tus propios datos (en ambos idiomas).
Entrenamiento del modelo personalizado:
Una vez entrenado el modelo, podemos aprovechar el entorno centralizado de Translation Hub para gestionar y administrar los modelos de traducción.
Se define como una herramienta de autoservicio sin tiempo de despliegue. Es, concretamente, una interfaz intuitiva y fácil de usar para empresas en la que pueden personalizar y gestionar sus cargas de trabajo de traducción de una manera eficiente en cuanto al coste y escalado. Permitiendo a las organizaciones obtener traducciones al mismo tiempo que optimizan la eficiencia, reducen el esfuerzo manual y centralizan la administración, el control y la seguridad necesarias.
Además, es compatible con todos los siguientes formatos de documentos:
Por otro lado, Cloud Translation API es el servicio que permite integrar la traducción automática en aplicaciones, sitios web y flujos de trabajo. Admite una amplia variedad de casos de uso, como traducción de texto, detección de idioma y transliteración. También permite trabajar con diferentes formatos de texto, como texto plano, HTML y documentos. Facilitando la traducción de todo el contenido web, documentos complejos o mensajes de chat.
Cloud Translation API se caracteriza por ser altamente escalable y cuenta con una estrecha integración con otros servicios de GCP, como Cloud Storage y App Engine, lo que agiliza la implementación y la gestión de tus aplicaciones.
En conclusión, Google Cloud ofrece un conjunto completo de herramientas de traducción que abordan las necesidades de las empresas en términos de traducción automática y personalizada.
Con la combinación de los servicios anteriores, podemos (1) entrenar un modelo personalizado al vocabulario específico del ámbito de cada empresa, (2) generar flujos de trabajo automáticos y escalables, y (3) tenerlo todo controlado en un entorno intuitivo, potente y flexible para superar las barreras lingüísticas, poder llegar a audiencias globales y comunicarse de manera efectiva en un mundo, cada vez más, interconectado.